En este artículo repasaremos los principales motivos para decidir por qué invertir en branding. La marca es el activo más valioso de las empresas, pues es la suma de cómo los clientes, empleados y otros grupos de interés perciben a la organización.
Invirtiendo en branding, seremos capaz de dar la forma deseada a esas percepciones, siendo esto una de las claves para influir en el comportamiento. Y es el comportamiento (de los grupos de interés y de la marca) lo que finalmente impacta en el resultado final.
Antes de empezar, quizás sea necesario repasar brevemente qué es branding.
La marca no debería entenderse como otro coste a incluir en la partida de marketing. El desarrollo de la marca es una inversión que, si se realiza correctamente, redundará en rendimientos exponenciales a lo largo de la vida del negocio.
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Al invertir en branding…
…estaremos ayudando a desarrollar la marca, y esta es una de las inversiones más sólidas que una empresa puede hacer. Especialmente si una organización se encuentra en un proceso de crecimiento estancado, ingresos decrecientes o una crisis de enfoque: mercado, público, propuesta.
Si tenemos en cuenta los beneficios de una marca bien posicionada, sería difícil argumentar en contra de que apostar por el branding puede ser una de las inversiones más sólidas que una compañía puede hacer.
Tras esta primera reflexión, comenzamos a ver las 5 razones para decidir por qué invertir en branding.
5 razones para invertir en branding.
A continuación veremos las 5 razones fundamentales para tener claro por qué deberíamos invertir en branding.
1. Atraer público más cualificado.
El correcto desarrollo de la plataforma de la marca permitirá identificar exactamente qué tipos de clientes son los que están más alineados con la cultura y el propósito únicos de la empresa.
Definiendo con detalle qué tipos de clientes son los que mejor encajan con la empresa, seremos capaces de alinear la identidad de la marca para dirigirla exactamente a los clientes ideales (también conocidos como buyer personas).
Si quieres definir tus perfiles de clientes, puedes usar esta plantilla gratis de buyer persona.
De este modo, -no solo- será más probable que los clientes correctos adquieran su producto o servicio, sino que también estaremos trabajando la lealtad y relación con la marca (se sienten identificados con la marca).
2. Cerrar ventas con mayor facilidad.
Existen grandes diferencias a nivel esfuerzo comercial entre tratar de vender una marca desconfigurada y obsoleta; y una marca fresca y diferenciada.
Las marcas bien definidas son más fáciles de vender porque su posicionamiento, valores y beneficios están entrelazados en su narrativa de marca.
El branding proporciona al equipo de ventas una ventaja necesaria para cerrar acuerdos con confianza y mayor facilidad.
Es decir, los argumentos para la puesta en valor de sus productos o servicios ya se ha articulado a través de la estrategia de marca.
Si hemos conseguido desarrollar una marca coherente y convincente, una gran parte del trabajo comercial estará hecho para el vendedor antes de la conversación inicial.
3. Optimizar los esfuerzos en marketing.
Al invertir en branding, podremos trabajar para conseguir una marca cohesionada y bien articulada que aumente la eficiencia y eficacia de todas las iniciativas de marketing.
Porque una buena marca simplifica la comunicación y hace que la compañía hable de manera más clara, facilitando el entendimiento de la oferta, lo que también genera empatía y confianza.
Al obtener un mejor entendimiento del público, seremos capaces de desarrollar campañas con mensajes más relevantes y dirigidos a los segmentos de clientes más valiosos.
La cohesión de la marca también significa que los esfuerzos de marketing se retroalimentan: cada una de las iniciativas refuerza a las demás.
Para asegurar que las acciones de marketing se alinean con la estrategia de marca, es importante la figura de un Brand Guardian o similar. Que es el encargado de filtrar y cohesionar todas las expresiones de la marca.
Gráfica comparativa entre los rendimientos estimados derivados de los esfuerzos en publicidad vs marca.
4. Aumentar el valor de la compañía.
El capital de marca o brand equity define el valor que tiene una marca desde un punto de vista de su capacidad para generar más ventas gracias a su notoriedad.
Esto no solo permite que las marcas puedan aumentar la valoración de sus productos y servicios, sino que también tiene un efecto considerable en el precio de las acciones (valor de la compañía).
La forma en la que se percibe una marca determina cómo se comportan sus clientes, y el comportamiento del cliente determina -entre otros- el rendimiento financiero de una marca.
El resultado a largo plazo de invertir en branding es conseguir marcas que se conviertan en activos de mayor valor a la hora de negociar o vender la compañía.
5. Determinar mayores márgenes.
Las personas están dispuesta a pagar precios superiores por las marcas premium. Por ello, al invertir en branding, podremos conseguir posicionarnos como líderes de la industria, ofreciendo un conjunto de propuestas de valor que ninguno de los competidores ofrece (o logra expresar).
Las personas no compran productos, compran marcas.
Las marcas que determinan un posicionamiento significativo pueden justificar su valor y cobrar precios más altos por sus productos o servicios.
Conclusiones.
Para algunas empresas invertir en branding es percibido como una necesidad opcional, sobre todo cuando los presupuestos están bajo presión.
Invertir en marca, es invertir en el negocio.
Los gestores deberían reflexionar y equilibrar sus planes para mantener el poder de sus marcas y aprovechar el potencial de combinar una marca fuerte con una óptima gestión de la comunicación, lo que permitirá obtener mejores resultados.
La conclusión transversal para tener claro por qué invertir en branding es que la marca no debe ser vista como un opción adicional, sino como un requisito esencial; un elemento clave y previo para cualquier acción de comunicación.